Factores que afectan los sueños
La interpretación correcta de un sueño se mantiene o cae con la hipótesis del inconsciente.
Sin ella, el sueño parece no ser más que un capricho de la naturaleza.
Según Jung son un conglomerado sin sentido de fragmentos de la memoria sobrantes de los acontecimientos del día.
Carl G. Jung Dream Analysis in its Practical Application (1930)
En este articulo vamos a desgranar los factores que afectan los sueños:
Los sueños no se deben mirar desde un único punto de vista.

Por ejemplo si tienes un pensamiento médico/científico no debes interpretar el sueño únicamente como un efecto mecánico del cuerpo.
Si tú te diriges más al pensamiento espiritual no debes pensar que los sueños solo provienen de los Dioses. ¡Estamos en un nuevo siglo!.
¿Por qué no tomar un poco de todo para interpretar los sueños?.
Lo mejor es llegar a conclusiones propias que a las conclusiones de otros, así pues te presento los diferentes factores que afectan esas imágenes que visionas cada noche:
Factores que afectan los sueños:
Influencias fisiológicas y patológicas:
Definitivamente las imágenes de los sueños pueden verse afectadas por el cuerpo, ¿Quién no ha tenido un mal sueño causado por una comida copiosa?
Así también hay muchos factores corporales que se reflejan en el mundo onírico.
Piensa en picaduras de insectos, lesiones, heridas o dolores. Por curioso que parezca la conexión fisiológica con los sueños no fue descubierto en tiempos modernos, sino por la antigua cultura china.
Sensaciones externas: Otro de los factores que afectan los sueños
Lo que está fuera del cuerpo, pero que es percibido por los sentidos también afecta a los elementos del sueño. Es decir lo percibido por los sonidos, el tacto, y el olfato, así tenemos que ese metálico sonido de muchos despertadores puede traer a una fase profunda de sueño imágenes de derrumbes o desastres.
Los despertadores modernos tienen sonidos (aunque electrónicos) más parecidos a la naturaleza, como de insectos o pájaros así se pueden incluir estos elementos en los sueños. Un clima frío puede acarrear imágenes invernales o el mojar la cama hacer que la persona sueñe que está nadando.

La memoria: Ante todo la memoria son los cimientos para la construcción de cualquier sueño, las experiencias aprendidas o vistas se mezcla. El proceso de «mezcla» no es azaroso, sino que se realiza de manera inteligente. La creatividad interna crea un mapa para descifrarse con elementos de la vida emocional, sexual, física, así como la espiritual. Sobre el punto de la vida espiritual incluso se han comprobado casos de vidas pasadas que son reflejadas en los sueños. Estas vidas pasadas se pueden revivir en primera o segunda persona en los sueños, y en muchos casos suelen explicar acontecimientos de la vida actual de la persona.
Los Deseos:
¡El pensamiento de Freud es que los sueños son una válvula de escape para los deseos reprimidos!.
La libertad y la intimidad que proporciona el mundo onírico es un campo fértil para hacer realidad esos deseos. También se hace uso del humor para enfrentar las frustraciones de la vida diaria. En todo caso es necesario un autoconocimiento profundo para poder dar estructura al significado.
Elementos premonitorios: Los sueños premonitorios pueden presentarse de una manera simbólica que debe interpretarse o de una manera realista, prácticamente literal, en muchos casos solo es el resultado de datos que se captan en la etapa de vigilia, en otros casos es una experiencia mucho más espiritual.
Viajes astrales: Este concepto está relacionado con un mundo que va más allá de la persona, y está relacionado con las teorías del inconsciente colectivo, los campos morfogeneticos y las teorías de R. Sheeldrake. El viaje astral conlleva la experimentación con lugares y personas que se diferencian en espacio y tiempo con los de la persona que experimenta el viaje.



¡Buenos alimentos informativos para todos!
Al reducir voluntariamente un sentido durante la vigilia, se fuerza y se ajusta una nueva percepción, lo que brinda un nuevo enfoque sobre la naturaleza de la realidad dejando de lado las condiciones afectadas al sentido. Es decir, la visión y sentir se convierten en sinónimos en la claridad.
Por lo tanto es una cuestión comunicativa.
En comunicación, se vuelve irrelevante la necesidad de una autoridad, juez y valorador. El amor, la libertad y el respeto, son sin la necesidad de evocarlas. Los comunicados se potencian y crean algo nuevo.
Sin embargo, en descomunicación y desarmonía, las palabras amor, libertad y respeto, surgen para indicar una carencia, un fantasma. El cliente se vuelve huérfano de su propia consciencia, de sí mismo, se polariza forzando el vínculo en dónde se generan nuevas palabras para indicar la situación del estado, como represión, obediencia, y tolerancia. Se sostiene un bucle.
Las palabras también son un sedimento desde un estado específico. Por lo cual, para algunas personas existen y para otras no, lo mismo sucede con las experiencias ordinarias o extraordinarias como necesidad de una representación acorde a una lógica establecida desde las creencias. Cuestión verificada también en el arte, las memorias son la materia prima en el colapso de un instante, bajo un estado específico.
En alguien que se aisla, lógicamente, le sucederán menos situaciones conflictivas, menos interferencias. Por lo cual, se puede saltar de cualquier cárcel virtual fácilmente. Pero la razón lógica y natural es el restablecimiento de la armonía del esclavizado, desarrollar su consciencia y modificar las referencias en su memoria.
Aquí se puede observar la naturaleza de la adicción en la recurrencia para obtener el efecto per cedero de liberación deseado.
El error se conserva en la memoria con un bastón de adaptación hasta tanto no se resuelva el defecto generador. La señal de distorsión es consecuencia de una información que intenta ser el centro de gravedad con el objetivo de prestar atención y hacer consciencia. Esto es debido a que la memoria de las apariencias es también atemporal.
Las memorias colapsan en un punto de acuerdo a un enfoque con efecto de reflejo especular, bidireccional en sentido y propósito.
Detrás del relato que explica la experiencia tal cual sucedió y sucede, sea ordinaria o extraordinaria, se encuentra la interpretación de ella, y también la interpretación sobre interpretaciones, y de todo lo que existe en el mundo, incluyéndonos. Lo importante es quién moviliza el contenido anímico, con qué, y para qué, y es el mismo actor que se encuentra gravitando en un centro emocional ilusorio y provisorio.
Las ficciones que forman el teatro son fantásticas, legales y técnicas. Según lo escrito o programado, todo es perfecto porque todo verbo tiene su sitio, pero no lo es desde el principio evolutivo de la consciencia.
La emoción y sensación es la verdad que suele justificar una situación mediante un relato, sin embargo, sus señales de distorsión son muy claras para indicar el error.
De la misma manera que se saca una espina física, se retira la ilusoria espina virtual.
La razón de advertir la señal y negarla, es la confusión misma que obliga a detener la máquina para concentrarse en la memoria(pasado).
Hay que comprender el abanico emocional y la mecánica del cuerpo, contenedor, vehículo virtual y físico, o de memoria sutil y densa.
La mayoría no da cuenta que posee las manos libres al no estar puntual y detalladamente en la mecánica de cada función biológica y construcción creativa.
Esa sensación de que alguien invisible y ajeno lleva el control de una manera opresora, se suele unir a la sensación de parasitaje energético desde una información conservada en la memoria, que el evocador moviliza inconscientemente. Esto implica que la emoción, positiva o negativa considerada como resultante, estén sujetas al paradigma de una situación patológica. Es una enajenación con la propia naturaleza en dónde el territorio privado se convierte en un campo de batalla regido por el miedo a la muerte.
El creyente entonces, no sólo se pelea consigo mismo, sino también se busca a sí mismo en la pelea.
Por lo tanto, la conciencia biológica es el límite y filtro de ajuste programable, es decir, puede ser un amo y tirano o un amigo y maestro, dependiendo de la intención del pastor del rebaño o de la oveja negra.
Si bien el amo y pastor se convierte en el 1, gobernando sobre las virtudes y defectos de su rebaño que suma sus 0, está obligado a sostener el estado de baja consciencia convirtiéndose en un esclavo más gobernando bajo permios y castigos, donde el premio suele ser simplemente no ser castigado. Por éste hecho se reproduce la forma de gobierno en cada intento de organización conformando una pirámide en cuyo centro se encuentra el creyente, como fantasma.
En cualquier circuito cerrado, sea una palabra, relato, sueño, pensamiento, ideología o sistema, tanto el inicio como el fin ya se encuentran predeterminados, las innumerables variantes que suceden entre esos dos puntos suman las estadísticas. Por ejemplo, tanto una desarmonía personal o una crisis social, poseen un mismo origen que repercute en diferentes efectos, enfermedades o situaciones de conflicto que revelan un estado de esclavitud. Todo lo fuera del circuito es lo desconocido que puede poner en peligro el orden establecido como lo normal.
El pensamiento está sujeto a un ordenamiento en planos bidimensionales de manera binaria, afectado lógicamente a la mecánica clásica que brinda sincronicidad entre el mapa y el territorio. Las proyecciones brindan previsibilidad pero una seguridad endeble.
La programación y red informativa sucede con la lógica y correspondencia que existe entre la luz y el ojo.
Gracias a esta misma mecánica, todos los trucos o engaños pueden ser descubiertos detrás de las ficciones fantásticas, legales y técnicas que la habilitan.
El factor, es el símbolo y lo literal codificado alfanuméricamente.
Por lo tanto, al entrar en un circuito cerrado, en un cuento, la sintonía y enlace obliga a crear un centro ilusorio de gravedad y de sentido para comprender que es lo que se está movilizando y con qué, mediante una simulación y un simulacro de confirmación.
De manera inconsciente, el guión dará las pautas para el actor desligando ilusoriamente la responsabilidad de sus acciones.
De manera consciente se comprende el agente precursor de la confusión confirmadas en los fallos lógicos de la conducta y sistema.
La consciencia, llamada Dios, somos cada uno y todos. El nombre personal, nunca puede contener y encarcelar algo que no tiene límites, sin embargo, se consigue ilusoriamente dentro de unos márgenes controlados.
La muerte entonces, da posibilidad del fin a toda estupidez y tiranía, ya sea de un momento, o de una vida.
Lo que muere entonces, es la apariencia.
Hola 💫
Gracias por compartir tu reflexión tan profunda y sentida.
En efecto, muchas veces los sueños y la conciencia nos hablan en símbolos más allá del lenguaje.
La percepción que describes, donde lo literal se funde con lo emocional y lo invisible, resuena con la idea de que soñar también es una forma de mirar el alma desde dentro.
En este espacio honramos la diversidad de pensamiento y la sensibilidad que despiertan estos temas.
Gracias por enriquecer la conversación con tu visión.
✨ Un abrazo de luz,
Ruth Montenegro